sábado, 26 de octubre de 2024

Isabel Quintanilla


En una pasada exposición de realistas de Madrid, ya sorprendió al público al obra de Isabel Quintanilla. De aquella exposición recuerdo un gran lienzo, un gran jardín con unos frutales contra un muro rojizo; no recordaba más, e inconscientemente, entrar en esta última exposición, también en el Thyssen el pasado mes de marzo (2024) la mente buscó buscando esa obra que, casi ya olvidada en la muestra, apareció al final, apareció como un nítido recuerdo que se hace realidad, que parece no haberse borrado nunca de la retina del visitante, aunque aquellos arbustos e incluso los frutales podían ser rosales. Son juegos de la mente. La exposición, ésta última tenía como título El realismo de Isabel Quintanilla y fue un magnífico paseo por el tiempo, de la pintora, de las amistades, sus influencias.

Roma (1998-1999) Óleo sobre lienzo pegado a tabla. Galerie Brockstedt, Belín

"Porque en la realidad está todo. El artista lo que hace es transformar esa realidad en otra realidad que es el arte". Isabel Quintanilla.
Pescado (1989) Óleo sobre lienzo. Peter y Sibylle Voss-Andreae, Hamburgo 


El realismo de Isabel Quintanilla, en Museo Thyssen Bornemisza de Madrid, hasta el 02 de junio de 2024.

Delfos (1963) Delphy Óleo sobre tabla. Colección particular


sábado, 12 de octubre de 2024

Elena Gual


Mañana de otoño por El Retiro; un paseo frente al lago entre cientos de paseantes para fotografiar algunas esculturas de Marinas, Benlliure y Clará, y alguna reina de las que se bajaron de las cornisas del Palacio de Oriente; buscaba en concreto a doña Berenguela. Pasé frente a la Casa de Vacas donde se celebra una exposición de pintura. Es una de esas salas que el visitante siempre encuentra algo que no suele pasar inadvertido, sobre todo pintores que son de una galería ajena al Centro. En esta ocasión expone Elena Gual, anunciada en un cartel en la que se representa una de sus obras, y llama la atención la textura de la imagen: una mujer pintada a grandes rasgos, enérgicos golpes de pintura que se adivina la espátula no el pincel: Raíces. Elena Gual.

Desdé. 2024. Óleo y acrílico sobre lienzo (50 x 60 cm.)

Si algo llama la atención en la concepción de las obras, una figura de enormes trazos con espátula y un fondo siempre de un color: blanco, ocre, rojo, azul; la falta de definición en los rasgos provoca en la visión del espectador cierto desasosiego ante un personaje retratado, como si lo estuviese en tres dimensiones, exceso de volumen, exceso de materia pictórica, quizá con eso juega la artista a la hora de ejecutar su obra. Al respecto comenta, escrito sobre la pared, el curador de la exposición: "Lo enigmático de la concepción figurativa de la pintura de Elena Gual es su acentuación de carnalidad. Consigue que algo tradicional e incluso evidente adquiera un tono o, mejor, una materialidad misteriosa", (Fernando Castro Flores).

Sabor. 2024. Oleo y acrílico sobre lienzo (100 x 120 cm.)

En la semblanza que hay al principio de la muestra, se explica que la obra de la pintora mallorquina tiene como transformo la feminidad como tema central, y que "un accidente alérgico que la alejó del pincel, encontró en la espátula una técnica, que le permitió explorar la tridimensionalidad "; y añade, "las figuras femeninas emergen de la materia con una fuerza visceral. Sus pinturas evocan lo ancestral y lo íntimo...". Hay varios proyectos en los que la pintora desarrolla desde la figuración, casi todos en gran formato, hasta la abstracción con formatos más reducidos, en el que las formas están sin desarrollar, embrionarias, abocetadas, más enérgicas, golpes de espátula más violentos, más seguros. 

Virginia. 2024. Óleo y acrílico sobre lienzo (114 x 160 cm.)

Raíces. 2024. Óleo y acrílico sobre lienzo (160 x 100 cm.)

Raíces de Elena Gual en Centro Cultural Casa de Vacas, organizado por Arma Gallery en Parque del Retiro de Madrid, hasta el 27 de octubre de 2024.



domingo, 6 de octubre de 2024

Gonzalo Juanes


A la entrada de la sala de exposiciones del Canal de Santa Engracia, había un señor sentado en un banco esperando que abriesen la verja para entrar en la muestra. Debí llamarle la atención porque, de manera más o menos disimulada, me hizo una fotografía. Lo hizo con una Leica. Me acerqué a él y estuvimos hablando, de su cámara, d las exposiciones, del trato, aunque parezca mentira, que tienen los espectadores. Coincidíamos en muchas cosas, sobre todo en que nos gustaba la fotografía espontánea, tomada en la calle y eso era lo que íbamos a ver en la exposición de Gonzalo Juanes, poco retrato, poca pose, poco estudio. Muy  Era interlocutor era austriaco, su cámara Leica entrañable, de película, antigua , pequeña, extraordinaria. Nos despedimos cuando aún faltaban pocos minutos para que se abriese la verja del jardincillo que da paso a la puerta de la exposición. Yo me marché. Volvería unos días después, a otra hora quizá, con menos público, al menos esa era mi intención.

Dársena de fomento. Gijón 1966

Las imágenes, ya vistas, no dejaban de sorprender, un canto a la soledad, a la introversión del fotógrafo, de los personajes retratados, de los paisajes, la decadencia de un mundo que no pudo adaptarse, la decrepitud, la vejez, la luz, áspera, dura, envolvente, los ánimos personajes, la empatía del fotógrafo con su entorno, su tierra, su cultura,  su raíz y su origen:

"Sobre mí poco hay que decir: asturiano, nacido en Gijón hace 33 años. Profesionalmente perito industrial (lo cual no quiere decir que me sienta fotógrafo dominguero, sino fotógrafo integral; es decir, que siento como fotógrafo en todo momento).
Hace bastantes años que hago fotografía. Casi nunca me dio por presentarme en salones; he preferido -satisfaciéndome a mí antes que a los demás- seguir caminos que creo más acertados."
Carta a Carlos Pérez Siquier. Gijón, 19-1-1957

Cementerio de El Suco, barrio de Ceares, Gijón, noviembre 1967
Cuenca minera, octubre 1966

"Comprendo que esta fotografía es demasiado intimista, falta de esa garra "in" impacto. No está en vanguardia; he renunciado a epatar deliberadamente. Yo no sirvo para hacer eso; en mí sería falso; así que hago lo que sé hacer, lo que me gusta, lo que me da íntima satisfacción". 
Carta a Carlos Pérez Siquier. Gijón, 24-5-1972

Gijón, junio 1976

El parque. Gijón, febrero 1971

"El resultado son unas colecciones o series sobre determinados temas o ideas, cuyas fotos, vistas aisladamente, dudo de que sean dignas de un anuario.
Colecciones sobre la gente, sobre un parque visto desde el amanecer hasta el crepúsculo, sobre el paisaje de aquí sentido con una luz muy personal, sobre el paisaje urbano de un Gijón que desaparece, sobre la muerte en todas sus manifestaciones, etc.". 
Carta a Carlos Pérez Siquier. Gijón, 24-5-1972

Cuenca minera. Mayo, 1965

Gijón. Marzo, 1967

"... La luz plateada que dices que siempre busco en mis fotos. Esto es cuestión de raza, o de sensibilidad moldeada por factores geográficos y climáticos, supongo... A los del Cantábrico es la única que verdaderamente nos produce placer íntimo... El sol nos alegra, pero nos fatiga por su monotonía. Siempre acabamos por añorar el cielo gris, la bruma los valles aterciopelados y, de cuando en cuando, inesperadamente, las lejanías fosforescentes y cambiantes."
Carta a Carlos Pérez Siquier. Gijón, 27-12-1958

Gijón. 1966

Gijón- 1967

"Cuando estaba en Madrid aprovechaba los raros chaparrones para ir a mojarme y, a ser posible, me escapaba al Retiro donde huele a humedad. El Jardín Botánico todavía es mejor para este menester porque resulta más abandonado, quieto y nórdico. Creo que con esto habrás comprendido por qué no suelo hacer fotos al sol,... es cuestión de necesidad psicológica y aún fisiológica; es pura autenticidad."
Carta a Carlos Pérez Siquier. Gijón, 27-12-1958

Calle Serrano. Madrid, octubre 1965

Calle Serrano- Madrid, octubre 1967

"Una fotografía ambiciosa tiene que ser fruto de una actividad intelectual.
... El subjetivismo es fundamental en el manejo de la objetiva herramienta que es la imagen fotográfica.
... Lo difícil es manejar la imagen objetiva con personalidad, con talento, subjetivamente, y esto le es dado a muy pocos."
Carta a Carlos Pérez Siquier. Gijón, 22-5-1958

Lagos de Covadonga, 1963

Parque Isabel la Católica. Gijón, enero 1967

"La fotografía debe ser sencilla, de modesta apariencia, intencionadamente de tono menor. Un simple documento en el que se intenta captar un fugaz momento de lirismo."
Gonzalo Juanes


Gonzalo Juanes
, Una incierta luz, en Sala Canal Isabel II, en calle Santa Engracia, 125 de Madrid. Del 28 de mayo al 21 de julio de 2024.

miércoles, 2 de octubre de 2024

Juan Uslé


Tomé una de las hojas con la nota de prensa que hay en la entra de la galería sobre la exposición de Juan Uslé titulada Ojos en la duda, en la la Galería Elvira González. La leí mientras un grupo de personas recorría las salas atentas a la explicación que se daba a una de las obras. No presté mucha atención a las explicaciones, tan solo oí cómo una de las personas comentaba sobre la pincelada, cómo el artista tomaba el pincel y daba una pincelada enérgica, siempre igual, una a continuación de otra, de tal manera que era muy difícil distinguir una de la siguiente, en perfecto orden de ejecución, con un movimiento enérgico de muñeca, formando franjas horizontales de diferentes colores. Entendí con esta explicación parte del texto.

"La pintura de Uslé -se lee en la nota- a base de bandas paralelas vibrantes con pinceladas cortas superpuestas, expresa su vivencia más íntima, y como él mismo explica, coinciden con los latidos de su corazón. La calidad de esta obra radica en la profundidad de la imagen y la riqueza del color, que abarca todos los posibles tonos que se encuentran el naturaleza y en el espacio que rodea al artista. Con una calidad cromática única, Uslé transmite sabiduría y tranquilidad, y al mismo tiempo, energía y quietud".


Recorrido la muestra a través de los lienzos enormes, intentando desentrañar si existía algún orden de colores, como si se tratase un juego de banderas; las acuarelas, al contrario de los lienzos, son más pequeñas -no las fotografié por las sombras y los reflejos- parecían bocetos de éstos, en ese instante el coro de visitantes se fue disolviendo, silencioso, se desperdigó por las salas y supuse que fueron abandonando la galería. Tan solo quedó una visitante a la que le pedí posar como referencia frente a uno de los cuadros. Aceptó, sonrió y luego se marchó


En la nota de prensa, en la web, se lee un breve texto donde el artista comenta su proceso creativo: "son pinceladas discontinuas producidas por un contacto intermitente: muevo el pincel y lo aprieto contra el lienzo hasta que oigo el latido siguiente de mi corazón. Intento seguir un ritmo secuencial marcado por mi pulso y esa es la razón por la que casi siempre trabajo en estos cuadros de noche, especialmente aquí en Nueva York. Me hace falta concentración y silencio."



Juan Uslé, Ojos en la duda, en Galería Elvira González, en calle Hermanos Quintero, 1 de Madrid. hasta el 02 de noviembre de 2024.