lunes, 22 de abril de 2024

Jordi Socias


Jordi Socías es uno de esos fotógrafos que abarcan todo un periodo de nuestras vidas, tan amplio que frente a una de sus imágenes no es difícil pensar que nosotros, el espectador mismo, estuvo allí, que conoció aquella escena, que estuvo en aquel lugar y en aquel tiempo, no como protagonista, sino como parte, quizás una ínfima parte, tanto da.
-Yo estuve allí, le dije a otro espectador cuando se plantó frente a la fotografía de Canet Rock (1975). El hombre se sorprendió porque generalmente no se habla en las exposiciones, rara vez alguien comenta lo que se ve, s3a un cuadro o una fotografía, muchos hacen fotografías y las guardan como un tesoro y a continuación desaparecen sin despedirse.
-¿Qué le parece? La exposición, me contestó.
- Cualquiera de los que estábamos allí -le contesté- podíamos haber sido fotografiados. Cualquiera. Estuvimos hablando unos minutos.

Canet Rock. Barcelona 1975

Muchos son personajes callejeros, anónimos, de los que podíamos aparecer cualquiera, en la Barcelona de los años 70, en la que el fotógrafo, Socías, baja a la calle a mezclarse con todo el mundo. Aún recuerdo las horas perdidas en las Ramblas viendo subir y bajar riadas de gente, incluso se alquilaban sillas para disfrutar de aquellos desfiles improvisados de trabajadores, de turistas, de gentes de los bajos fondos, rateros, policías de paisano,... Sin embargo, no me gustaba, y esto se acentuaba en el último tramo de las Ramblas, la de Santa Mónica, tanto a derecha como a izquierda, en Arco del Teatro, en Escudillers, el agobiante olor a humedad, el molesto olor agrio de las calles, una acidez repulsiva, la falta de higiene,  olor a orines, la suciedad del adoquinado, las aceras siempre húmedas, las caras de los vecinos siempre serias, con ademán desconfiado, las voces ásperas, las miradas furtivas, violentas, las risas forzadas.

Barrio chino (Red light district (1974)

Pero había otros personajes, un elenco de íntimos que parecen cuidadosamente seleccionados, parte de la élite intelectual y artística, y aún así, el espectador, ínfimo en su pequeñez, en su recuerdo, en el desconocimiento de todos, los conoce, los reconoce y tiene la ocasión de escogerlos, uno a uno, entre sus gustos, sus referencias y al resto, olvidarlos.

Manuel Vicent. Escritor/Writer. Valencia 1996

De Manuel Vicente la exposición nos trae un texto breve: La foto que reveló el mundo de Jordi Socías, "En el descampado de aquel suburbio se veía a unas parejas, madres con niños de la mano, un tipo sombrío que iba hacia ninguna parte entre abrojos. Disparó una vez más la cámara para captar aquella imagen, que le había despertado la fascinación de tantas películas que había visto de chaval indómito en a oscuridad de los cines de barrio donde héroes y villanos, indios y vaqueros, galanes y mujeres inalcanzables se movían entre besos y revólveres, pero esta vez al revelar la foto Jordi Socías descubrió que en el agua bajo una luz roja fluctuaba también su propia imagen. Era la propia revelación sugestiva como fotógrafo. En ese momento supo que podía recrear y estructurar un mundo personal con una cámara". Manuel Vicent. Lo cierto es que pasado un tiempo no recuerdo si esa fotografía estaba en la exposición, pero me alegró no haberla fotografiado, como tampoco se fotografían los cuadros del Prado y se recuerdan, y en este momento recuerdo el resto de imágenes, algunas de las que no llegué a fotografiar y sin embargo pude retener, como la de Serrat, o las que sí como a VicentJuan Marsé , Francisco Leiro o Pedro Almodóvar.

Pedro Almodóvar. Cabeza borradora/Eraserhead. Madrid 2011

Leiro (Francisco Leiro). Escultor/Sculptor. Madrid 2016

Tanto Pedro Almodóvar como Francisco Leiro son artistas de la la galería Marlborough, que ha anunciado su cierre, una pérdida infinita en el ámbito cultural porque a través de la galería se expandía y se daba a conocer la obra de estos dos artistas. Ahora cabe preguntarse dónde acudir para ver sus obras más recientes. Volverán. Siempre se vuelve.

Al final de la escapada, Jordi Socías, en Sala Canal Isabel II, en calle Santa Engracia, 125 de Madrid. Hasta el 21 de abril 2024.